Por Rosalba García
Este 14 de junio de 2012 la Casa de la memoria indómita fue inaugurada con la presencia de Elena Poniatowska, Rosario Ibarra de Piedra, Nina Serratos secretaria de cultura del gobierno capitalino, Laura Gaytán desaparecida política, entre otras personalidades; así como la compañía de familiares y amigos. Decenas de personas invadieron la casa, ubicada en la calle Regina número 66, en apoyo al esfuerzo contra el olvido. La casa museo es un espacio que recupera la memoria de su lucha y permite dar voz a los que ya no están.
Un largo proceso de gestión realizado por el Comité Eureka encabezado por Rosario Ibarra de Piedra, quién empezó su lucha en 1975; el Gobierno del Distrito Federal entregó en 2005 el lugar que hoy se ha convertido en la Casa de la memoria indómita, particular forma de honrar la lucha de las madres y los familiares de los desaparecidos.
Laura Gaytán mujer secuestrada y desaparecida, a 32 años de su temible experiencia señaló, “Ser un testimonio viviente, de que los desaparecidos políticos existen, que están y estuvieron en instalaciones del gobierno como el campo marte número 1 y que en ese lugar se aplicó cualquier cantidad de vejaciones y de humillaciones atroces. Yo estuve ahí y estoy aquí para denunciarlo”. Además, hizo público el agradecimiento a la labor de Rosario Ibarra y de las Doñas, que ya no están, para obtener su libertad comentó, “gracias porque salieron a las calles con mi foto y mi nombre en la mano para reclamar mi libertad”.
Elena Poniatowska se mostró gustosa por poder ver realizada la casa-museo y destacó que la desaparición significa la peor forma de tortura. La Casa de la memoria presenta distintas salas en las que se exhiben exposiciones de diferentes hechos históricos que culminaron en siniestros casos de desaparición.
Por su parte, Rosario Ibarra de Piedra al grito de ¡Vivos los llevaron! ¡Vivos los queremos! enfatizó, “es muy doloroso y triste saber que hay muchas familias que sufrimos por nuestros familiares desaparecidos”. Además, dijo que en la Casa se recordará todo lo mejor de los familiares desaparecidos, hijos, compañeros o hermanos.
Rosario Ibarra de Piedra agradeció la presencia de todos y cada uno de los presentes. Lanzó la invitación de acercarse y dar vida a la Casa siempre que se pueda. Finalmente, cortó el listón inaugural tan pronto se logró tener movilidad gracias al esparcimiento de los asistentes.