Estados Unidos e Israel se oponen a la resolución, mientras que México, España y la Unión Europea piden el levantamiento del bloqueo a Cuba.
Por Redacción / @Somoselmedio
La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó por abrumadora mayoría una resolución que pide a Estados Unidos a poner fin al embargo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba desde 1960. La votación, que tuvo lugar este año, contó con un apoyo significativamente amplio, con 187 votos a favor, dos en contra (Estados Unidos e Israel) y una abstención (Ucrania), marcando la trigésima primera ocasión en la que se solicita el levantamiento del bloqueo.
Desde 1992, la Asamblea General ha emitido peticiones anuales solicitando a Estados Unidos a poner fin al embargo, sin lograr un cambio significativo en la política estadounidense hacia Cuba. La resolución A/78/L.5, sometida por Cuba, pide nuevamente a los países con sanciones similares a derogarlas o eliminarlas según su ordenamiento jurídico.
El Secretario General de la ONU en Cuba, Francisco Pichón, comentó que “el bloqueo, las restricciones unilaterales externas, y la exclusión de Cuba de mecanismos e instrumentos financieros internacionales, son un gran obstáculo para su desarrollo sostenible.”
La votación se llevó a cabo en un ambiente cargado de argumentos en contra del embargo. Un diplomático cubano defendió la resolución, acusando a Estados Unidos de justificar una política ilegal y moralmente insostenible. Además, el diplomático cubano destacó una serie de “prácticas condenables” en Estados Unidos, incluyendo el racismo sistémico, la brutalidad policial y la represión de los derechos reproductivos.
Por su parte, el representante de Estados Unidos afirmó que su país apoya al pueblo cubano y la lucha por los derechos humanos en Cuba, pero también argumentó que las sanciones son una herramienta para fomentar la democracia y el respeto a los derechos humanos en la isla.
La embajadora de España, en representación de la Unión Europea, señaló que el levantamiento del embargo podría facilitar las reformas económicas y el desarrollo sostenible en beneficio del pueblo cubano. Además, pidió a Cuba que garantice los derechos y libertades civiles, políticos y económicos reconocidos internacionalmente.
La representante de México condenó de manera categórica el bloqueo, declarando que es contrario al derecho internacional y ajeno a los valores de convivencia pacífica. También hizo un llamamiento para poner fin a este bloqueo, especialmente en un contexto de crisis económica y sanitaria.
La embajadora de El Salvador, en representación del Sistema de la Integración Centroamericana, expresó su solidaridad con Cuba y criticó la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, lo que ha obstaculizado su desarrollo sostenible.
El bloqueo a Cuba comenzó en 1960 y se fue endureciendo en diferentes momentos históricos, alcanzando a terceros países a partir de 1992, fecha en la que la Asamblea General emitió su primera petición a Estados Unidos para que acabe con él.