- La empresa donó 40 millones de pesos para la construcción de una planta de tratamiento de aguas, como una medida de legitimación y altruismo con la población, sin embargo, la concesión que tiene deja sin accesibilidad y saneamiento a miles de personas cercanas a San Cristóbal de las Casas.
Pese a extraer más de un millón 300 mil litros diarios de agua para la comercialización de su variedad de productos y dejar sin vital líquido a las comunidades cercanas a San Cristóbal de las Casas, la empresa FEMSA-Coca Cola, pretende construir una planta de tratamiento de aguas residuales dentro del área natural protegida de los humedales María Eugenia, manantiales naturales que dotan de agua a la ciudad.
Alma Rosa Rojas, representante de la Plataforma por el Derecho Humano al Agua en Chiapas, denunció que la empresa embotelladora realiza estas acciones para legitimizarse, con el fin de convencer y ganarse la simpatía de la población, por tanto, empezó a realizar donaciones al Ayuntamiento Municipal de San Cristóbal, que en un primer paso iban en construir bebederos en escuelas.
Sin embargo, la empresa ha decidido realizar una donación de 40 millones de pesos para construir una planta de tratamiento de aguas residuales, a través de una organización denominada “Pro-Natura Sur”, como una acción de legitimación, sin embargo, pretende ser construida dentro del área natural protegida de los humerales María Eugenia. Además, cabe señalar, que ya se firmó una carta de intencionalidad con Jerónima Toledo, alcaldesa de San Cristóbal de las Casas.
Según lo dicho en palabras de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), los humedales de San Cristóbal son únicos, ya que es de alta importancia para la conservación de la diversidad biológica, lo cual incluye el sustento de la vida humana y al ser espacio de suministro de agua potable.
Cabe señalar, que la Red por el Cuidado de la Vida y la Madre Tierra en el Valle del Jovel, ha realizado labores extenuates para mantener protegida esta área, ya que además de sanear el agua de forma natural, sirve para suministrar del vital líquido a la ciudad.
Los humedales cuenta con un polígono de 12 mil 831 metros cuadrados, donde esta planta pretender abarcar más 4 hectáreas, lo que va a impactar directamente en la recaudación de agua de los manantiales que se mantienen ahí, informó Rosa Rojas.
La ambientalista detalló que esta acción de legitimación es avalada por el Ayuntamiento de San Cristóbal de las Casas, ya que en recientes días se formalizó una carta de intención con la presidenta municipal y el director de ecología, para llegar a cabo este proyecto. Añadió “pretender instalar un humedal artificial, dentro de un humedal natural que provee agua limpia”.
Especialistas y organizaciones defensoras de derechos humanos han denunciado que por medio de las concesiones que mantiene la empresa FEMSA-Coca Cola dentro de San Cristóbal, se ha ahondado la crisis por la accesibilidad al agua y aumentado la epidemia de diabetes.
Por ejemplo, la organización Otros Mundos A.C, detalló que la embotelladora FEMSA-Coca Cola, cuya concesión inició en 1995 y se renovará hace 3 años, extrae un estimado de 1.3 millones de litros de agua al día de dos pozos ubicados en las faldas del cerro Huitpec, en San Cristóbal de las Casas, donde las comunidades indígenas cercanas carecen en extremo del vital líquido y comiencen a sufrir consecuencias debido al consumo indiscriminado de este refresco.
La extracción que realiza la empresa equivale a 65 mil garrafones de 20 litros al día, este aprovechamiento del vital líquido se realiza en un espacio donde el acceso al agua y su saneamiento se da peor que en varios países africanos, según lo señalado por Leo Heller, Relator de las Naciones Unidas para el Derecho al Agua y Saneamiento, en su visita en 2017.
Heller explicó que a unos kilómetros de San Cristóbal de las Casas, se conmovió al ver como mujeres y niñas, acompañas de burros acuden a charcos de agua turbia varias veces en el día, para llenar pesadas garrafas de plástico y abastecerse de la único vital liquido a la que tienen acceso durante varios meses en el año.
El aprovechamiento de esta agua por medio de una concesión hacia la empresa además de la sobreexplotación de los mantos acuíferos del Valle de San Cristóbal, una epidemia de diabetes que según la Organización Mundial de la Salud en 2030 será imparable.
Ante este contexto, la presidenta municipal de San Cristóbal, avaló la construcción de esta planta de tratamiento, con una donación de 40 millones de pesos, sin tomar en cuenta las afectaciones que producen a la ciudadanía.