Con motivo del tercer aniversario de la toma del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas “Samir Flores Soberanes” (INPI), los pueblos ocupantes de la comunidad otomí siguen exigiendo una mejores condiciones de vida y el acceso a una vivienda digna.
Por Valeria Vázquez / @valecita_0501
Fotos de Karen Castillo y Andrea Amaya / @and_amaya17
El miércoles 11 de octubre. En una transmisión en vivo por el Facebook de Regeneración Radio, se sostuvo un diálogo con la Comunidad Otomí, quienes desde hace tres años tienen tomadas las instalaciones del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), exigiendo mejores condiciones de vida.
Durante el foro, denunciaron que, a tres años de la toma del INPI, el gobierno de la Ciudad de México no ha dado una solución a la comunidad Otomí residente en la Ciudad de México. Montserrat Rojas, locutora de Regeneración Radio, entrevistó a Isabel Valencia, quien es delegada del Congreso Nacional Indígena (CNI), y a Filiberto Margarito, quien es concejal de la comunidad Otomí.
Los entrevistados comentaron que, mediante una asamblea, decidieron tomar las instalaciones el 12 de octubre, pero no han recibido respuesta por parte de las autoridades. Su demanda incluye “vivienda, salud, derecho al trabajo, y educación”. Sin embargo, han experimentado desprecio y racismo por parte de las comunidades indígenas.
Aseguraron que este gobierno no los ha tomado en cuenta y temen que el siguiente gobierno haga lo mismo. Algunos residentes llevan 25, 30 y 50 años viviendo en la Ciudad de México sin conseguir una vivienda digna, ya que el Gobierno no ha aclarado la situación de los terrenos de Roma #18 y Zacatecas #74 de los que fueron despojados. “Lo que han hecho es darnos citas, las cancelan y nos atiende un funcionario que no puede tomar decisiones, entonces no podemos avanzar en nada”.
Montserrat Rojas señaló que se han planteado soluciones en varias mesas de diálogo, y se ha intentado contactar a Claudia Sheinbaum, la exjefa de gobierno, así como a Alfonso Suárez del Real y Martín Batres, quienes intentaron buscar una solución, pero las demandas de la comunidad no han avanzado, lo que llevó a la toma de las instalaciones del INPI en 2020.
Isabel Valencia explicó que tomaron las instalaciones porque, donde estaban antes, no tenían ningún servicio y debido a la discriminación y racismo que enfrentaban. Esto los impulsó a tomar medidas que no quisieron tomar, ya que afecta tanto a ellos como a terceros, pero esto no estaría sucediendo si el gobierno hiciera su trabajo.
En la entrevista se destacó el desentendimiento político de los últimos tres años y la falta de acción en áreas clave, como la eliminación del racismo y la mejora de las condiciones de vida para los ciudadanos. La lucha de la comunidad Otomí cuenta con el apoyo de diversas organizaciones.
Se señaló que uno de los objetivos de la toma del INPI fue honrar la memoria del defensor Samir Flores Soberanes y convertirlo en un refugio que reconozca su lucha y sus frutos, y que sea un lugar donde se luche por la vida que le fue arrebatada.
“El gobierno en esta cuarta transformación, que para nosotros es la cuarta destrucción de los pueblos, es discriminación. Yo ya no los reconozco, ellos han intentado acabarnos, pero no han podido. No van a obtener nuestra lengua, nuestra vestimenta, nuestras tradiciones, nuestra autonomía y autodeterminación. Eso no se lo vamos a dar. Por eso queremos seguir conservándolos y hacemos un llamado al pueblo de México para que apoye esta lucha, porque la lucha es para ellos, porque ellos también son pueblo”, señaló Isabel.
El foro concluyó con el comentario de Isabel de que la organización es lo único que puede mantenerlos vivos, sin rendirse ni venderse, tomando conciencia y buscando su historia. La lucha continúa y no se rendirán. “Aquí estamos y estaremos”.