Verter cloro en la entrepierna de los varones es la acción que ha tomado la activista rusa Anna Dovgaliuk en el metro de San Petersburgo en Rusia contra los hombres que se sientan con las piernas abiertas ocupando más espacio del que les corresponde en el transporte público.
En un video subido a redes sociales por la propia Dovgaluik afirma que esta práctica conocida como manspreading “Es un acto de violencia de género y una total falta de respeto a las mujeres cercanas…” en dicho material también se explica cómo se obtuvo la mezcla que se le roció a cerca de 70 hombres que viajaban el metro realizando esta práctica que incomoda no solo a las mujeres, sino a varios usuarios en general. “Actúo en nombre de todos los que tienen que soportar las muestras de sus cualidades de macho en el transporte público”.
El video de la activista ya supera las tres millones de reproducciones en Youtube y al final Dovgaliuk cierra diciendo: “Moscú y Kazán son los siguientes” haciendo referencia a los sistemas de transporte de metro en esas ciudades rusas.