En el Día Internacional del Derecho a la Verdad, colectivos de familiares y organizaciones de derechos humanos de toda América Latina alzan la voz para condenar las desapariciones forzadas y exigir verdad, justicia, memoria y garantías de no repetición.
Por Redacción / @Somoselmedio
Ciudad de México, 24 de marzo 2025.– En el marco de la conmemoración del Día Internacional del Derecho a la Verdad, este 24 de marzo, una amplia red de familiares de víctimas de desaparición forzada y asociaciones de derechos humanos se unieron para emitir un enérgico pronunciamiento. Su objetivo principal es visibilizar y condenar la persistencia de las desapariciones forzadas en América Latina, un flagelo que continúa lacerando a las sociedades de la región.
“Nuestra lucha incansable, que es la de todas las familias y colectivos que buscamos a nuestros seres queridos desaparecidos, está llena de dolor y determinación”, señala el comunicado emitido por la red. La exigencia central se dirige a los Estados latinoamericanos, a quienes exigieron a asumir plenamente su responsabilidad en la búsqueda y localización de las víctimas, el enjuiciamiento de los responsables y la reparación integral del daño, todo ello en concordancia con los estándares del sistema internacional de protección de los derechos humanos.
Un punto crucial del llamado es la exhortación a aquellos Estados que aún no han ratificado la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas a que lo hagan de manera urgente. Subrayan la obligación de estos países de garantizar las condiciones necesarias para la prevención de este grave crimen.
Las organizaciones denunciaron la impunidad reinante como un “crimen continuado”, producto de la falta de voluntad política para erradicar patrones arraigados y de políticas negacionistas que buscan proteger a los perpetradores. En este sentido, exigieron a los Estados latinoamericanos el cumplimiento cabal de sus obligaciones internacionales en materia de desaparición forzada, conforme a lo establecido por Naciones Unidas, la Corte Interamericana y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
La red de familiares y organizaciones enfatizó que “la verdad, la memoria y la justicia son nuestros derechos fundamentales como víctimas, familiares y acompañantes, y de ellos se desprende nuestro derecho de búsqueda”. En consecuencia, demandaron la creación de comisiones de la verdad efectivas, mecanismos de búsqueda con los recursos necesarios –incluyendo protocolos y alertas tempranas– y facultades para acceder a información de alto nivel que permita esclarecer los crímenes del pasado y del presente. Asimismo, recalcaron que la información obtenida debe ser fundamental para garantizar justicia a las víctimas a través del enjuiciamiento de los responsables en todos los países de la región.
Finalmente, las organizaciones firmantes reafirmaron su compromiso de trabajar de manera coordinada contra la impunidad y en defensa de los derechos humanos de las víctimas y sus familiares. Hicieron un llamado a la cooperación y el apoyo de la comunidad internacional para alcanzar sus objetivos de verdad, justicia, memoria, reparación y garantías de no repetición efectivas para todas las víctimas de desapariciones forzadas en América Latina.
El comunicado concluye con una declaración de unidad y compromiso permanente con la lucha por los derechos humanos: “¡Unid@s, podemos lograr justicia, verdad, memoria, reparación, garantías efectivas de no repetición para todas las víctimas de desapariciones forzadas en América Latina! ¡Firmamos en solidaridad y nos constituimos en red permanente, en compromiso con la lucha por los derechos humanos para todos, todas, todes! ¡Porque vivas se las llevaron, vivas y vivos los queremos!”.