CDMX, 10 de diciembre de 2019.- Esta tarde, el Estado mexicano pidió una disculpa pública a la periodista Lydia María Cacho Ribeiro por las violaciones a los derechos humanos perpetradas en su agravio en diciembre de 2005.
La también defensora de derechos humanos, recibió en voz de Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, la disculpa por parte del Estado mexicano por las violaciones a los derechos humanos a la libertad de expresión, libertad y seguridad personales, a no ser sometida a torturas, a la no discriminación en razón de género, y acceso a la justicia.
Frente al presidium conformado por Olga María Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación; Marcelo Ebrard, Secretario de Relaciones Exteriores; Ana Cristina Ruelas, directora Regional de Article 19; Jesús Peña, represente adjunto en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y Juan Ramón de la Fuente, Representante del Gobierno de México ante las Naciones Unidas; Encinas Rodríguez reafirmó el compromiso pleno del Estado de cumplir con la decisión final adoptada por el Comité de Derechos Humanos de la ONU en su caso, en particular con la sanción de todos los responsables y las garantías de no repetición.
La organización Article 19 explicó que este evento es un paso muy importante y significativo en la reparación del daño a Lydia Cacho, trece años después de ocurridas las violaciones a sus derechos humanos por la publicación del libro Los demonios del Edén.
“Sin duda, escuchar por primera vez en voz de un alto funcionario del Estado mexicano que se reconocen la vulneración de sus derechos y se pide una disculpa por ello es un acto con un potencial efecto reparador.”
La organización en defensa de la libertad de expresión detalló que este hecho es un punto de partida para lograr restañar en todas sus dimensiones a la periodista y defensora de derechos humanos, tal como lo ha reconocido el propio Estado mexicano en voz de Alejandro Encinas, quedan asignaturas relevantes pendientes de cumplir como la captura, enjuiciamiento y sanción a los responsables materiales e intelectuales.
En el mismo sentido, Article 19 llamó a que el Estado mexicano adopte medidas de carácter estructural para revertir el patrón de agresiones contra periodistas y personas defensoras de derechos humanos en México, así como erradicar la impunidad concomitante.
“Sin garantías de no repetición, la probabilidad de que ocurran similares violaciones a derechos humanos contra quienes ejercen su derecho a expresarse libremente e informar a la sociedad, es muy alta. No debemos perder de vista que México es uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, y según la propia Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el más peligroso de América Latina.”
La organización destacó que la tortura sexual contra mujeres detenidas por fuerzas de seguridad y castrenses es un patrón sumamente alarmante que debe revertirse. El caso de Lydia Cacho es un botón de muestra de cómo actúan las autoridades policiales y militares cuando tienen a mujeres bajo su custodia, recurriendo a la violencia sexual como una forma de castigo o escarmiento.
Finalmente, la directora de Article 19 explicó que este hecho histórico debe ser un parteaguas para iniciar una nueva etapa en la relación del Estado mexicano con quienes defienden derechos humanos y ejercen el periodismo, erradicando por completo prácticas nocivas que van desde el hostigamiento y la intimidación, hasta la criminalización, persecución y las vulneraciones graves a la libertad, integridad personal y vida de integrantes de estos grupos de población.