Por Rodrigo Piña
Antes de dejar su puesto (próximo 15 de julio), el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera Gutiérrez, sostuvo una reunión con los Ministros de Finanzas del G-20. Este grupo, al que México pertenece, está conformado por las 20 economías más importantes del mundo, esto porque representan el 85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
La reunión se llevó a cabo en Venecia, Italia donde se analizaron diversos temas sobre el desarrollo económico mundial tras la pandemia. Sin embargo, el punto más importante trató sobre la aprobación del impuesto mínimo global, el cual tiene como objetivo principal, que grandes empresas como, Google, Facebook, Amazon, Apple; entre otras, estén obligadas a pagar un gravamen del 15% de sus ganancias.
“Llegamos a un acuerdo de carácter histórico” señaló Arturo Herrera, “va a garantizar disminuir al mínimo la evasión fiscal que existe, sobre todo, entre las grandes empresas”, continuó. Ya que un entramado de empresas multinacionales evaden impuestos al no tener presencia física en países donde operan y, sin embargo, son regiones que representan un alto índice de ganancias para ellas.
Este acuerdo, trata de mitigar la evasión fiscal que empresas multinacionales realizan, resultando ser una pérdida importante para el fisco. Al ser un impuesto universal, las empresas se verán forzadas a pagarlo igual en todas partes y dejarán de valerse de países que tienen una tasa de impuestos baja, conocidos también como “paraísos fiscales”.
El impuesto será del 15% a empresas que facturen como mínimo 890 millones de dólares anuales y se prevé que entre en vigor en 2023. De acuerdo a las primeras estimaciones, se calcula que se recaudarían aproximadamente 150,000 millones de dólares al año; representando una inyección económica importante a la economía mundial, y necesaria en el contexto actual.