Texto: Karen Castillo / @karencitatacha
Isabel Castillo tiene 62 años, es sordomuda y fue vista por última vez el sábado 24 de julio del 2021 en el tianguis ubicado en Col. Jardines de Chalco, Estado de México; en donde estuvo en Av. Crisantemos esquina con Calle Orquídeas, de 12:00 del día a 4:30pm.
Antes de ir a ese tianguis dónde se vio por última vez, se pudo confirmar a través de las cámaras que Isabel recorrió el tianguis ubicado en Calle oriente 44 Colonia Guadalupana, municipio de Valle de Chalco. Vestía pants gris obscuro, blusa color rosa pastel, gorra color rosa pastel, suéter negro, y zapatos negros.
Hasta el momento, no hay indicios de qué pudo haber pasado con Isabel; la Fiscalía del Estado de México no tiene más pistas o una línea de investigación clara, la familia continúa saliendo a las calles a buscarla con sus propios medios.
Desaparecer en el Estado de México
Isabel Castillo ha vivido en Valle de Chalco por más de 30 años y por casi 20 años ha trabajado en diferentes tianguis de la zona en donde compra y vende ropa de segunda mano; los tianguistas la conocen, y conoce todos los tianguis en la zona de Valle de Chalco a la perfección.
El sábado 24 de julio del 2021 salió de su casa alrededor de las 9 de la mañana, acompañó a su hija de 24 años a la parada del camión, ahí se despidieron.
Después de dejar a su hija, se dirigió al tianguis en donde regularmente labora los sábados para ver si había trabajo disponible ese día. Las horas pasaron, Isabel no llegó a su hogar.
Cuando marcaron las 10pm, su familia comenzó la búsqueda, ella jamás había llegado a su hogar más tarde de esa hora y mucho menos se había ausentado por una noche.
Mientras que su hija acudía a la Fiscalía de Chalco a denunciar la desaparición de su madre, la hermana de Isabel la buscó por todo el trayecto que su hermana seguía para llegar y regresar del tianguis.
“La señora con la que suele trabajar los sábados dijo no haberla visto ese día, otros tianguistas confirmaron haberla visto, todos las conocen porque en esos lugares compra o venden ropa. Mucha gente confirmó haberla visto ese día.”
Días después de la desaparición de Isabel, su hija recordó el domicilio de una persona conocida, la cual confirmó que Isabel estuvo con ella en el tianguis ubicado en Col. Jardines de Chalco el día en que desapareció.
La señora también confirmó que, alrededor de las 4pm, Isabel emprendió el camino de regreso a casa. Sin embargo, nadie sabe que fue lo que pasó después. Su familia dice que parece que a Isabel “se la tragó la tierra.”
“Fuimos a buscarla por los llanos para ver si estaba ahí, la fuimos a buscar mi familia y yo como podíamos con nuestras propias herramientas, está en Locatel con diferentes folios, hemos ido al SEMEFEO, hemos identificado cadáveres que no son de nuestra hermana… y nada… ni viva, ni la palabra que no queremos mencionar.”
Así, Isabel es ahora una de las más de 80,000 mil personas desaparecidas en México, su familia lucha todos los días por obtener información que las lleve a encontrarla con vida.
La Burocracia del sistema de justicia mexicano
“Nuestra familia no sabia nada de esto, de la búsqueda de personas, no sabíamos que se tenía que hacer, que se debe de hacer, cómo debe de ir la investigación. No sabemos que exigir o solicitar, todas las primeras semanas fue una pérdida de tiempo en la búsqueda de mi hermana.”
Estas son las palabras con las cuales la familia de Isabel Castillo describe lo difícil y frustrante que ha sido buscar a su hermana en México.
Esta es la desgarradora historia que se repite a lo largo del país; son las familias las que investigan, buscan, y muchas veces identifican a las miles de personas que desaparecen cada año en México. La historia de Isabel Castillo no es diferente.
Después de casi cuatro semanas desde que la familia levantó la denuncia por desaparición, acudieron a la Fiscalía para pedir avances, la familia se sintió descorazonada al ver que la carpeta estaba perdida, y que, al encontrarla, las declaraciones de la hija de Isabel no habían sido asentadas en la carpeta.
Los videos de la zona de Chalco en donde Isabel desapareció tampoco fueron solicitados ya que la persona encargada de la Mesa de Trámites estaba de vacaciones.
Así, las primeras horas y días de valiosa importancia cuando una persona desaparece, fueron simplemente una pérdida de tiempo para la familia a causa de las omisiones de Fiscalía.
La familia de Isabel tampoco cuenta con asesoramiento jurídico a pesar de haberlo solicitado.
“Yo pienso y sigo insistiendo que hubo muchas cosas en contra de la situación de mi hermana, y que han retrasado la búsqueda estos 7 meses. Uno llega con su desesperación y desde la reja nos decían que aún no había mesa de trámite, que regresaramos cuando ellos regresaran de sus vacaciones.”
“Yo no puedo decir que la Fiscalía ha actuado mal, pero también ha sido difícil obtener su apoyo, no es fácil porque uno no sabe que pedir o que preguntar. Eso es lo difícil, nadie esta preparado para buscar a su familiar.”
Mientras los meses pasan, la familia de Isabel continua la búsqueda de su hermana a través de la Fiscalía, pero también con sus propios medios, tal como lo hacen miles de familias en todo el país.
El dolor de la desaparición de un ser querido
“Es su pena día y noche, lloran todo el tiempo, no sé qué más hacer, no sé a quién más acercarme, no sé a quién pedirle el milagro.”
Familiares de Isabel nos cuentan que lo más difícil de la desaparición de su hermana ha sido el dolor de los padres de Isabel de 90 y 95 año. Nos dicen que la vejez y estado de salud de sus padres no les permite unirse a la búsqueda pero que cada día cargan con el dolor de no ver a su hija de regreso. Esperando a Isabel también se encuentra su hija de 24 años y un nieto.
De acuerdo con la familia, la búsqueda de Isabel también ha significado mucho dolor a causa de la falta de sensibilidad de la población mexicana; muchas personas se han alejado de la familia, en redes sociales también han recibido comentarios que hacen burla o minimizan la desaparición de Isabel
En los teléfonos que han ofrecido para recibir información; han recibido llamadas de burla o información que desvía la investigación. En un principio, la persona a cargo de la investigación de la desaparición de Isabel opinaba que la señora se había ido de su casa por su voluntad ya que, hasta ese momento, se recibía mucha información de diferentes personas que afirmaban verla por el rumbo. Las informacioón fue descartada al revisar las cámaras.
A pesar de esto, la herman de Isabel dice que no dejará de buscarla hasta encontrarla, su familia también pide que cualquier persona que tenga información sobre el paradero de su hermana la comunique a los teléfonos disponibles.
