Este martes primero de agosto del 2023, continuaron las mesas del foro nacional de horror a la guerra, resistencia por la vida. El tema que se abordó fue el papel de la paz en el país y en los pueblos zapatistas.
Saraí Aguilar/ @Iray_foto
En el marco de este foro, se buscó frenar la violencia que se ha presentado contra los pueblos de México, en particular los pueblos zapatistas. Uno de los ponentes que dio inicio a la mesa por la paz fue Carlos González García, abogado en materia agraria y de derecho indígena, especializado en la defensa de las tierras y territorios indígenas e integrante de la Comisión de Coordinación y Seguimiento del Congreso Nacional Indígena desde 1996.
Refirió que es complejo hablar de paz en un país incendiado por la guerra, porque para hablar de paz, forzosamente se debe hablar de guerra. “Desde hace algunos años, en México y en el mundo, el permanente estado de guerra, las pandemias, las epidemias y las catástrofes de todo tipo son de un modo cada vez más avasallante las que dan oxígeno al capitalismo y ese es el contexto grave que estamos viviendo como humanidad”, externó el integrante de la Comisión de Coordinación y Seguimiento del Congreso Nacional Indígena.
Araceli Osorio Martínez, de la colectiva Las Siempre Vivas, activista y sostenedora de vida, simpatizante del movimiento feminista y en general de las luchas por la dignidad, recalcó que la memoria permite reconocernos en un mundo tan hostil en medio del horror de la guerra. “Mirando lo que miro todos los días, mirándoles a ustedes a los ojos, mirando familias buscando no solo a sus familiares sino buscando justicia, buscando verdad, buscando paz primeramente en nuestros corazones y ser”, refirió Osorio.
Otro aspecto importante que se debatió fue la estrategia de control social que se impone a través del miedo. Es importante saber que se le está hablando a una sociedad que tiene miedo y terror, lo que implica un conservadurismo importante que lleva al consentimiento social en presencia del ejército o la guardia nacional. Se ha normalizado la violencia y al mismo tiempo se ha abordado violando todos los derechos de la sociedad, convirtiéndose en un modelo que a la sociedad le parece muy eficiente e incluso ejemplar la llegada de la militarización.
Para finalizar, se presentó Magdalena Gómez, abogada especialista en derecho indígena, quien fue otra ponente invitada al foro. Expuso que hay muchas dimensiones de la paz, pero también muchos escenarios de impunidad. Cuando hablamos de violencia, no se combate; cuando hablamos de justicia, esta no se logra; y cuando hablamos de paz, no se tiene.
Cada vez, el país se inunda de violencia y de impunidad, alejando totalmente una paz conjunta, que debería ser un lazo fuerte en la sociedad de México.