La Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal emitió un comunicado en el que exigieron a Claudia Sheinbaum, Comandanta de las fuerzas armadas de México, que tome acciones urgente para frenar el tráfico y venta de armas a grupos delictivos y sicarios en Chiapas y en todo el país.
La demanda se produce en medio de un incremento de la violencia en la región y tras el reciente asesinato del Padre Marcelo Pérez Pérez, a quien consideran un “Santo Mártir por la Paz”.
A 15 días del asesinato del Padre Marcelo, Las Abejas de Acteal denunciaron la falta de acción de las autoridades y el aumento de la violencia en el estado. “No queremos una justicia simulada y a medias”, afirmaron en su comunicado, exigiendo una investigación rápida y sin impunidad. Además, recordaron el caso de Simón Pedro, otro defensor de derechos humanos asesinado cuya muerte, sostienen, fue manejada con indiferencia por la Fiscalía de Chiapas.
El comunicado subrayó que la violencia en Chiapas no es un fenómeno reciente, sino que responde a una historia de despojo y represión. La organización recordó el legado de Samuel Ruiz García, obispo de San Cristóbal de Las Casas y defensor de los derechos indígenas, quien también enfrentó amenazas por su trabajo a favor de los pueblos originarios. “Hoy, a 100 años del nacimiento de jTotik Samuel, recordamos que mucha gente le odiaba y temía su pensamiento”,señala Las Abejas de Acteal, destacando cómo los intereses poderosos en Chiapas siguen oprimiendo a las comunidades.
Además de hacer un llamado a las autoridades mexicanas, Las Abejas de Acteal han solicitado a organismos internacionales, como la ONU y la CIDH, establecer una observación permanente en Chiapas para vigilar el respeto a los derechos humanos en la región. Argumentan que la situación se ha vuelto incontrolable, señalando que el crimen organizado actúa sin restricciones en el estado, con la aquiescencia del gobierno local y federal.
Por último, en nombre de los 45 mártires de la masacre de Acteal y del Padre Marcelo, la organización pide “el desarme inmediato de sicarios y grupos criminales”, así como el fin de la violencia en contra de los pueblos organizados.