Miembros de la Comunidad Indígena Otomí bloquean la Av. México-Coyoacán en una protesta contra la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por el corte de luz a su sede, la Casa de los Pueblos Indígenas “Samir Flores Soberanes”.
Los manifestantes denuncian represión y hostigamiento por parte del gobierno de la CDMX y exigen respeto a sus demandas de vivienda digna y reconocimiento de sus derechos culturales.
Por Abraham Reyes García/ @Abraham_ReyesG
En una jornada de protesta que comenzó este sábado 22 de junio a las 10:30 am, miembros de la Comunidad Indígena Otomí decidieron tomar la Av. México-Coyoacán en la Colonia Xoco, con un plantón para denunciar el corte de luz a las instalaciones de la Casa de los Pueblos Indígenas “Samir Flores Soberanes”, antes llamado Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Desde hace más de dos años, la Comunidad Indígena Otomí mantiene ocupado el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) como una medida de protesta para exigir viviendas dignas y el reconocimiento de sus derechos culturales. Sin embargo, su lucha se ha visto nuevamente afectada por el reciente acto de represión perpetrado por la CFE.
De acuerdo con los hechos denunciados en la página de Facebook Otomíes en Resistencia, el pasado viernes 21 de Julio, aproximadamente a las 22:20 Hrs., personal de la CFE se presentó a las afueras de la Casa de los Pueblos y Comunidades Indígenas con la instrucción de cortar la luz de manera definitiva. Este corte ha dejado a la comunidad sin acceso a servicios esenciales, como agua, iluminación y saneamiento.
La comunidad denunció que esta acción de gobierno es una clara muestra de represión contra sus demandas legítimas de vivienda digna y una respuesta al prolongado abandono gubernamental. Se ha destacado que, además de las dificultades que enfrenta la comunidad en su lucha por mejores condiciones de vida, el acervo de arte indígena que data del Siglo XVII también se encuentra en riesgo debido a la falta de energía eléctrica.
Los manifestantes denunciaron que esta situación es preocupante, ya que pone en una situación vulnerable a las madres con hijos recién nacidos, quienes requieren acceso al vital líquido y condiciones mínimas de salud para su bienestar. La comunidad hace un llamado urgente a organizaciones sociales, civiles y políticas, así como a los pueblos originarios, colectivos y redes de resistencia, para que se sumen a esta denuncia y apoyen la lucha contra la represión que enfrentan.