El gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, anunció el cambio de nombre del Golfo de México a “Golfo de América”. La medida, formalizada mediante una orden ejecutiva el pasado 9 de febrero de 2025, ha sido recibida con escepticismo y rechazo, especialmente por parte de México, que considera el cambio como una afrenta a su soberanía y patrimonio histórico.
Por Redacción / @Somoselmedio
CDMX, 18 de febrero 2025.- El gobierno de Estados Unidos ha generado controversia al anunciar el cambio de nombre del Golfo de México a “Golfo de América”. Según la administración estadounidense, esta medida busca “celebrar el legado de grandeza de América” y fortalecer la identidad nacional. Sin embargo, críticos argumentan que la decisión tiene un trasfondo político y estratégico, considerando que el Golfo de México es una región rica en recursos naturales, como petróleo y gas, y de gran importancia para el comercio marítimo internacional.
El presidente Trump defendió la medida en un discurso público, afirmando: “Es hora de que el mundo reconozca la contribución de Estados Unidos a esta región. El nombre ‘Golfo de América’ refleja nuestra historia y nuestro liderazgo”.
Por su parte, el gobierno mexicano, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, rechazó el cambio de nombre, señalando que este solo aplica a la plataforma continental de Estados Unidos, que abarca 22 millas náuticas desde su costa, y no afecta las aguas territoriales de México o Cuba.
Sheinbaum Pardo destacó que Google, en respuesta a una carta enviada por el gobierno mexicano, confirmó que en México se seguirá viendo el nombre “Golfo de México” en sus mapas, mientras que en Estados Unidos se mostrará como “Golfo de América”. Sin embargo, la Presidenta enfatizó que México no acepta que se renombre ninguna zona geográfica que incluya parte de su territorio nacional o que esté bajo su jurisdicción.
El gobierno mexicano, a través del canciller Juan Ramón de la Fuente, envió una segunda carta a Google reiterando que el decreto del presidente estadounidense solo aplica a la plataforma continental de Estados Unidos y no tiene validez sobre las aguas mexicanas. Sheinbaum Pardo advirtió que, de no recibir una respuesta satisfactoria, México procederá a ejercer las acciones legales pertinentes en tribunales internacionales.
La Presidenta también recordó que el Golfo de México es un cuerpo de agua compartido por México, Estados Unidos y Cuba, y que cualquier intento de renombrar áreas fuera de la jurisdicción estadounidense es inaceptable. El gobierno mexicano ha proporcionado sustento histórico, técnico y jurídico para respaldar su posición y está dispuesto a ampliar esta información si es necesario.