Este sábado 26 de enero familiares velaron al niño Felipe Gómez Alonzo, de origen maya Chuj, quien falleció el pasado martes 24 de diciembre mientras se encontraba bajo la custodia de la patrulla fronteriza. El menor había sido capturado cuando, junto con su padre, intentaban cruzar la frontera.
Según un reporte de la patrulla fronteriza, Felipe Gómez Alonso falleció en la madrugada de Navidad presuntamente por una influenza tipo “A”. Después de una serie de trámites, el cuerpo de Felipe llegó a Huehuetenango a un mes de su muerte. A pesar de la tristeza, nadie de su familia pudo ir y recibir el cuerpo del niño, debido a que no tienen recursos y carecen de dinero para viajar desde su comunidad hasta la ciudad de Guatemala.
Catarina Alonzo Pérez, madre del menor, familiares y vecinos, velaron los restos de Felipe en su humilde vivienda, una casa de madera de techo de teja que no cuentan con ningún servicio básico.
La muerte de Felipe Alonso se sumó a la de Jakelin Caal Maquín, niña maya Q’eqchi’ originaria de Alta Verapaz, quien también falleció dos semanas antes cuando se encontraba bajo la custodia de autoridades migratorias de los Estados Unidos.
Este domingo por la mañana, familiares, acompañados de la comunidad, sepultaron a Felipe Gómez Alonzo en el panteón de Yalambojoch. Catarina, su madre, despidió a su hijo colocando dentro un saco sus juguetes y ropa mientras que su hermana mayor escribía en su tumba “falleció en la Navidad del 2018 en Estados Unidos.”