CDMX, 4 de diciembre 2018.- Durante su conferencia matutina del día de hoy, Andrés Manuel López Obrador dijo que ser “servidor público no es para hacer dinero”. Lo anterior en respuesta a los empleados públicos de alto nivel que han interpuesto recursos jurídicos contra la reducción de salarios.
“Hicimos nosotros el compromiso de bajar los sueldos de los altos funcionarios públicos para aumentar los sueldos de los servidores públicos de abajo, que ganan muy poco. Entonces, se bajan los sueldos de los de arriba, para aumentar los sueldos de los de abajo. Es justicia laboral”.
El presidente explicó que si a los funcionarios públicos del más alto nivel de los tres poderes no están de acuerdo con la reducción de salarios tienen derecho a tomar las acciones jurídicas necesarias para que la autoridad competente se encargue de resolver.
Añadió que la medida forma parte de la política de austeridad comprometida en la campaña, y recordó a Morelos quien postuló que “el servicio público no es para hacer dinero, es para servir a los ciudadanos”. Además, destacó que es deshonesto que un funcionario público acepta recibir hasta 600 mil pesos mensuales.
“Eso es corrupción en un país con tanta pobreza. Si un servidor público quiere ganar, como sucedía, 600 mil pesos mensuales, eso es un acto de deshonestidad. Pero bueno, ese es mi punto de vista.”
Obrador añadió que “No sólo de pan vive el hombre. La felicidad no es el dinero, la felicidad es estar bien con uno mismo, nuestra conciencia, con el prójimo y servir a los demás. Eso es el servicio público, a quien no le guste ahí está el sector privado”.
Lo anterior fue explicado en respuesta los más de tres amparos impuestos por servidores públicos federales en contra de la Ley de Remuneraciones publicada en el Diario Oficial de la Federación el pasado cinco de noviembre, donde se detalla que ningún funcionario federal puede tener un sueldo superior al que gana el Presidente de la República.