Frente a Secretaría de Gobernación, la tarde del 05 de marzo, el Comité Salvemos Temacapulín, Acasico y Palmarejo informó que, con respecto al conflicto de la presa el Zapotillo acueducto León-Guanajuato, no hay ninguna decisión tomada.
En la reunión sostenida con Lázaro Cárdenas Batel (coordinador de asesores), Javier Guerrero (de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación) y representantes de la Comisión Nacional del Agua, se solicitó la revisión del proyecto.
De acuerdo con el activista Gabriel Espinoza Iñiguez, es un conflicto que se viene gestionando desde 2005, donde los distintos niveles de gobierno han violado los derechos humanos de las comunidades de Temalacapulín, Acasico y Palmarejo.
El Comité resaltó que el proyecto fue consultado con las comunidades afectadas: el 95 % de la población dijo no al megaproyecto de ABENGOA; empresa española involucrada en la termoeléctrica en Huexca.
Pobladores y organizaciones denunciaron los incrementos en el costo del megaproyecto. Hasta 2017 se tenía documentado la cifra de 20 mil 856 millones de pesos.
El agua: una necesidad mal planificada.
Debido a las condiciones áridas y a la escasez de agua en el estado de Jalisco, los megaproyectos para reservar agua son percibidos comon necesarios. Sin embargo, su realización puede tener impactos negativos, que dan lugar a una serie de movilizaciones de las comunidades, por posibles afectaciones.
Según Raúl Pacheco-Vega la problemática no es nueva:
Desde el periodo presidencial de Salinas de Gortari (1988-1994) se podían observar intenciones de reconfigurar la manera en que la ciudad de León obtiene el agua; sin embargo, al analizar diferentes notas de periódico se puede observar que esto también ha generado un descontento por parte de diferentes actores, ya que han surgido algunos cuestionamientos sobre por qué son los habitantes de una región diferente los que se tienen que contribuir al suministro del agua, así como sobre la cuestión de quiénes son los beneficiarios de este futuro suministro, es decir, si únicamente serán beneficiados los habitantes de León o si este proyecto está pensando en las necesidades de la industria de León; señala el Profesor-Investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica en su texto, El megaproyecto de la presa El Zapotillo como nodo centroidal de conflicto intratable. Un análisis desde la ecología política.
En el caso de la presa, el proyecto se planteó mal desde un principio: la construcción de la pared implica que tres comunidades queden sumergidas bajo el lago artificial, lo que ha generado desplazamientos en la comunidad.
Ante ello, el Comité hizo un llamado al presidente Andrés Manuel López Obrador para cumplir su compromiso de salvaguardar a las comunidades y generar otra forma de gestión del agua: El agua, para que llegue a todos, no se va resolver con la construcción de presas.
Ante una posible consulta, como en el caso del PIM, Iñiguez, resaltó que esta puede representar un riesgo, debido a que se pueden aplicar a personas que no tiene interés jurídico ni de derechos humanos.