Vestidos de negro como símbolo de luto a los caídos en Tlatelolco, estudiantes de la Escuela Preparatoria 11 de la Universidad Autónoma de Guerrero, marcharon por la calle principal de la ciudad en conmemoración por la masacre del 2 de octubre de 1968 ,en la plaza de las tres culturas, en la ciudad de México.
La marcha partió aproximadamente a las 6 de la tarde de las instalaciones de la Preparatoria 11 rumbo al zócalo, frente al Ayuntamiento Municipal, donde se realizó un mitin denunciando la masacre del 2 de octubre como “crimen de lesa humanidad”.
“Con el paso de las décadas a pesar de la agresión militar, signo de lo que no se puede derrotar por la vía política, no podrán borrar -aunque quieran- el movimiento del 68 porque es vida y la vida florece. El movimiento estudiantil está presente en esta tarde, como la de hace 51 años. Somos jóvenes que estamos aquí para recordar que no seremos pasivos. Dos de octubre no se olvida!, Atenco, Aguas Blancas, Tlatlaya y 43, los queremos vivos”: Gritaron los estudiantes durante su participación en esta movilización.
Al llegar al ayuntamiento, los jóvenes colocaron mantas sobre los muros con las leyendas: “somos hijos de la revolución, nietos del 68 y hermanos de los 43”; “2 de octubre no se olvida, es de lucha combativa”; “2 de octubre no perdonamos, no olvidamos”; en los carteles rezaban: “el silencio es repudio a la represión”; “más vale vivir de pie que vivir de rodillas”; “maldito aquel que apunte su arma al pueblo”.
Durante el mitin, estudiantes denunciaron que actualmente existen familias en las comunidades Me’phaa de Acatepec, Guerrero, que padecen pobreza. “Carecen de lo más elemental; no tienen acceso a la salud, a la educación y a una vivienda digna. Muchos niños y niñas nacen con desnutrición severa, sin que las autoridades garanticen el derecho a la alimentación adecuada y suficiente.”
Detallaron que muchas familias de la montaña de Guerrero, “sobreviven con 100 pesos a la semana, si bien les va. Las violencias propiciadas por el estado y el crimen organizado ha elevado el número de personas asesinadas. En Guerrero se tiene un registro hemerográfico de 6 personas que son privadas de la vida, diariamente. Este clima de violencia trae aparejado el grave problema de la desaparición de personas, feminicidios y desplazamientos forzados de familias.”
Recordaron que durante el movimiento del 68 muchos jóvenes perdieron la vida por soñar con una sociedad democrática y justa. “La visión miope del gobierno fue utilizar la fuerza para contener la protesta social. Esta escalada de violencia culminó con la masacre del 2 de octubre de 1968.” Explicaron.
A 51 años del movimiento del 68, los jóvenes denunciaron que “nada ha cambiado”. Muestra de ello es lo sucedido hace cinco años, con la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.
“Ambos acontecimientos, nos muestran las practicas funestas de un régimen autoritario que asesina y desaparece a estudiantes. Estas graves violaciones a los derechos humanos, se mantienen en la impunidad, las altas esferas del poder, continúan encubriendo a los perpetradores. Sigue intacto el pacto de impunidad donde ya no existe una línea divisoria entre los agentes del estado y las organizaciones criminales.”
Al termino de la manifestación, los estudiantes exigieron al gobierno de México que escuche la voz de los ciudadanos y ciudadanas.
“Los pueblos cuentan con una sabiduría milenaria y nos han enseñado a lo largo de los siglos que la verdadera democracia se construye desde abajo, en las comunidades donde se respetan los derechos de todos y todas para garantizar la igualdad y la justicia. Que los hechos del 68 y la desaparición de los 43 normalistas nunca más se repitan.”