Por Humberto Robles/@H_Robles
Ofelia Medina es una laureada actriz, directora, dramaturga y luchadora social. Su carrera es muy vasta y prestigiosa en el teatro, la cinematografía, la televisión y la radio. Su solidaridad y participación constante al lado de las luchas sociales la colocan como una de las activistas más congruentes y comprometidas del país. Es fundadora del Fideicomiso para la Salud de los Niños Indígenas de México.
Las Musas griegas del Teatro, Talía y Melpómene, no escatimaron en derramar todas sus virtudes sobre Ofelia Medina, nacida en Yucatán, quien realizó estudios de danza en la Academia de la Danza Mexicana y de actuación en el Actor’s Studio de Lee Strasberg. Su primera aparición en el cine fue en la cinta “Pax”, de Wolf Rilla, a la que le siguió “Patsy mi amor”, de Manuel Michel. A partir de entonces ha trabajado con reconocidos directores como Luis Alcoriza, Roberto Gavaldón, Alfonso Arau, Sergio Olhovich, Luis Estrada, Lita Stantik, Matilde Landeta, Ernesto Medina y María Novaro, entre otros. Mención especial merece “Frida: naturaleza viva”, dirigida por Paul Leduc, película multipremiada en Cuba, Estados Unidos, Alemania y México, la primera cinta sobre la vida de la pintora mexicana Frida Kahlo, la cual supera con creces la versión hollywoodense. Cabe señalar que la película de Leduc tuvo un reconocimiento nacional tras haber alcanzado un enorme éxito en varios festivales internacionales, refrendando el tristemente célebre dicho de que “nadie es profeta en su tierra”.
En teatro, Ofelia ha sido dirigida por los directores más prestigiados de México como Julio Castillo, Juan Ibáñez, Marta Luna, Héctor Mendoza, Jesusa Rodríguez, Arturo Sastré, Luis de Tavira, entre otros, actuando en obras como “Lástima que sea puta” de John Ford, “Donna Giovanni” versión de Jesusa Rodríguez y Alicia Urreta, “Exiliados” de James Joyce, “Traición” de Harold Pinter, “El Cántaro Roto” de Heinrich Von Kleist, entre muchas otras. Intervino en el Homenaje a Saramago, en el Palacio de Bellas Artes, y presentó el espectáculo “Voces mexicanas” en Roma, Italia. Actualmente actúa y dirige la obra “La noche que jamás existió”, que formó parte del programa mundial Shakespeare Lives.
Asimismo, ha actuado y dirigido espectáculos escritos por ella misma como “Mexican Señorita” (Premio AC de Nueva York), “Sor Juana hoy”, “Cada quien su Frida”, “El placer de nuestra lengua”, al lado de Rubén Albarrán (vocalista de Café Tacuba), “Íntimamente, Rosario de Chiapas” (con poemas y textos de Rosario Castellanos), espectáculos que ha llevado allende nuestras fronteras cosechando muchos premios.
La hermosura y la calidad actoral de Ofelia también se ha disfrutado en la pantalla chica. Son memorables las telenovelas “Lucía sombra”, “Paloma”, “Rina”, “La gloria y el infierno” y “Toda una vida”, basada en la vida de la tiple María Conesa. También formó parte del programa especial “Las canciones de Cri Cri” al lado de Plácido Domingo y en años recientes actuó en las series “El Señor de los cielos”, “Mujeres asesinas” (versión mexicana), y en las telenovelas “Los Rey”, “Secretos de familia” y “Tanto amor”.
En la radio participó en las radionovelas “Amorosos fantasmas” y “Benita Galeana”, en programas como “Crónicas de fin de milenio” y en más de cien sobre literatura erótica. Por otro lado, aparece en el video musical “María” del grupo Café Tacuba. Y para regocijo de los hacedores teatrales, da talleres en manejo de a voz, expresión corporal y de dirección de actores tanto a estudiantes como a profesionales.
Un aspecto fundamental -y sin el cual no se podría comprender en toda su dimensión a esta mujer admirable- es su actividad como luchadora social, misma que ha sido ejemplar e incansable. En su juventud, formó parte del movimiento estudiantil de 1968. Posteriormente, a raíz del alzamiento del EZLN, se solidarizó con la causa zapatista. Debido a esto y como ella misma lo expresó “El gobierno del estado de Chiapas me declaró Persona Non Grata e intentó expulsarme del estado. Fui defendida por muchas personas y permanecí allí trabajando hasta el día de hoy”.
Declaró que “la verdadera batalla del zapatismo está en atender de una vez las necesidades de las comunidades” y señaló que “entre las necesidades más urgentes están las de mejorar la nutrición de los menores de edad y hacer a las mujeres protagonistas de su propio desarrollo, un plan a largo plazo en el que se han dado ya los primeros pasos”. Esta es una de las razones por la cual Ofelia fundó el Fideicomiso para la Salud de los Niños Indígenas de México. También formó parte de los comités por la Libertad de los Presos de Atenco y de la Campaña por la Defensa de la Madre Tierra y el Territorio.
También ha sido nombrada Mayora de comunidad nahua en Querétaro y Hermana de comunidades huicholas en Jalisco. Por su trabajo por los Derechos Humanos y su trayectoria artística recibió la Medalla de Oro en Pau, Francia, entre muchos otros merecidísimos reconocimientos. Recientemente estuvo en el programa Coyunturas 2018: México al revés.
Por dentro y por fuera, Ofelia Medina posee una belleza inconmensurable. Además es madre, abuela, amiga, camarada de luchas, compañera en las tablas y los sets. Tanto en las pantallas como en los escenarios, así como en en la vida cotidiana, nos deleitamos con esta mujer valiente, sensible, íntegra, solidaria, creativa, crítica, con una enorme fortaleza, una dulzura maternal y una sensualidad inquietante y seductora, quien decidió estar del lado de los desposeídos y los marginados de esta tierra. Si Frida Kahlo escribió “Viva la Vida”, nosotros exclamamos “Viva Ofelia Medina”.