Home Comunidades indígenas Comunidades indígenas de Guerrero exigen acción urgente tras el Huracán John

Comunidades indígenas de Guerrero exigen acción urgente tras el Huracán John

El pasado domingo 6 de octubre de 2024, la casa de justicia de Espino Blanco de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC-PC) organizó una asamblea regional para exigir la atención urgente a las comunidades indígenas devastadas por el huracán John. En la reunión participaron más de 35 comunidades, las cuales señalaron el olvido sistemático por parte de las autoridades estatales y federales.

Por Redacción / @Somoselmedio 

Este domingo 6 de octubre de 2024, en una asamblea regional celebrada en la casa de justicia de Espino Blanco, la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC-PC) convocó a la unidad para enfrentar los estragos que el huracán John ha dejado en la Montaña de Guerrero. Más de 35 comunidades me’phaa, na savi y nahuas coincidieron en que la región, marcada por la pobreza, ha sido históricamente ignorada por los gobiernos estatal y federal, cuyo enfoque está en zonas turísticas y no en los pueblos indígenas.

El huracán John, que tocó tierra hace más de una semana, dejó a estas comunidades sin acceso a servicios básicos como agua, luz y alimentos. A pesar de los esfuerzos locales, la falta de respuesta gubernamental ha obligado a las comunidades a valerse por sí mismas, lo que ha generado un llamado urgente para reconstruir la región desde la organización comunitaria.

Comunidades indígenas de Guerrero exigen acción urgente tras el Huracán John

Durante la asamblea, se acordó rellenar un formato facilitado por Abel Bruno Arriaga, titular de la Secretaría para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y Afromexicano (SEDEPIA), con el fin de formalizar los daños y presionar a las autoridades para que volteen a ver la Montaña. Además, se programó una conferencia de prensa para el miércoles 9 de octubre, donde se expondrán los daños en la región y se exigirá una respuesta más rápida y efectiva por parte del gobierno estatal y federal.

El presidente de Malinaltepec, Jhon Navarro Mateos, se comprometió a apoyar a las comunidades en la reconstrucción, aunque mencionó las limitaciones logísticas. Actualmente, las vías de acceso están bloqueadas y muchas comunidades siguen incomunicadas. “Estamos rentando maquinaria para abrir caminos, pero no es suficiente para dar abasto a todas las zonas afectadas”, comentó.

La situación en la Montaña es alarmante. Martín Rosales Sierra, excoordinador de la casa de justicia de Espino Blanco, señaló que las comunidades indígenas han quedado completamente desamparadas. Las carreteras, tuberías de agua y redes eléctricas están severamente dañadas, lo que ha dificultado la llegada de ayuda.

Algunas comunidades como Ahuejullo, en el municipio de Tlacoapa, permanecen sin acceso, mientras que el río Tamiaco en Totomixtlahuaca ha destruido los caminos, impidiendo la comunicación y el abastecimiento de alimentos. Otras localidades, como El Carrizal, Pascala del Oro y Colombia de Guadalupe, siguen sin luz ni agua, lo que ha obligado a las comunidades a buscar alternativas para sobrevivir, muchas veces recurriendo al apoyo mutuo entre los propios habitantes.

Durante la asamblea, Abel Barrera Hernández, director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, criticó la falta de atención a la Montaña en la declaratoria de desastre emitida por el gobierno federal. A pesar de que 12 municipios de Guerrero fueron incluidos en dicha declaratoria, ninguna comunidad de la Montaña fue contemplada. Barrera subrayó la importancia de que los presidentes municipales y las autoridades comunitarias realicen un reporte detallado de los daños para solicitar la inclusión de estos municipios en el decreto federal de desastre, lo que permitiría acceder a fondos para la reconstrucción.

“El problema es que sin una declaratoria formal, no llegan los recursos. Es esencial que los presidentes municipales, junto con sus cabildos, formen un comité de protección civil que formalice las solicitudes de apoyo. Si no, seguiremos viendo cómo la atención se centra en las zonas turísticas mientras nuestras comunidades quedan olvidadas”, advirtió Barrera.

La comunidad de Espino Blanco, junto con Tlachinollan, será la encargada de recolectar los reportes de los daños en diversas comunidades y núcleos agrarios, con la esperanza de presionar al gobierno para que incluya a la Montaña en el plan de reconstrucción. La visita de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, programada para los próximos días, será clave para determinar si las demandas de las comunidades serán atendidas.

En la intervención final de la asamblea, Jhon Navarro Mateos expresó su frustración: “El gobierno solo está priorizando a los municipios turísticos, mientras nuestras familias indígenas siguen sin luz ni agua. Estamos abriendo caminos con lo poco que tenemos, pero necesitamos más apoyo. No podemos esperar más”.

NO COMMENTS

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

Salir de la versión móvil