Mario Vergara dedicó su vida a la búsqueda incansable de personas desaparecidas y se convirtió en un referente en su lucha por la justicia.
Por Redacción / @Somoselmedio
Fotografías Tlachinollan
En un emotivo acto realizado este viernes, Mario Vergara, reconocido buscador de personas desaparecidas, fue despedido por sus seres queridos, amigos y miembros de colectivos de desaparecidos provenientes de diversas partes del país. La activista y madre de cuatro desaparecidos, María Herrera Magdaleno, también estuvo presente para rendirle tributo.
Mario Vergara dedicó su vida a la búsqueda incansable de personas desaparecidas y se convirtió en un referente en su lucha por la justicia. Durante su arduo caminar, se unió al dolor de decenas de familias, colaborando junto a ellos en la búsqueda de sus seres queridos.
Con ingenio y valentía, Vergara ideó una herramienta invaluable en su labor: la varilla ligera y punzante, que le permitía ubicar cuerpos enterrados. Siempre llevaba consigo sus herramientas y compartía su sabiduría y generosidad, enseñando a otros a identificar los escondrijos utilizados por los perpetradores. Sin temor, ingresaba a las madrigueras para desenterrar los cuerpos, guiando a quienes lo acompañaban en la búsqueda.
Vergara tenía la capacidad de identificar los olores de las personas amadas y brindaba consuelo a aquellos que encontraban los restos de sus seres queridos. Sus testimonios y enseñanzas, como un gran buscador, serán recordados y extrañados en un país que lamentablemente se hunde en la proliferación de fosas clandestinas y la alarmante cifra de más de 110,000 personas desaparecidas.
El legado de Mario Vergara trasciende su propia vida, dejando una huella imborrable en la lucha por la justicia y la búsqueda de la verdad. Su incansable labor inspira a seguir adelante en la búsqueda de los desaparecidos y en la exigencia de un país más seguro y justo para todos.
Descansa en paz, Mario Vergara, el buscador de personas desaparecidas. Tu dedicación y compromiso con los derechos humanos no serán olvidados.