Decenas de heridos arrojó el incendio en una toma clandestina en Tlahuelilpan, Hidalgo, hace unas horas. Personal de Petróleos Mexicanos, en coordinación con autoridades estatales y federales, acudió al incendio ocasionado durante el robo de combustible de una toma clandestina en el ducto Tuxpan-Tula, en el kilómetro 226 en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo.
Para atender la emergencia, autoridades enviaron 11 ambulancias, 13 médicos de urgencias y dos especialistas y se activó la alarma verde en el Hospital de Tula.
Los lesionados reportados con quemaduras graves han sido trasladados al Hospital Norte y Sur de la Ciudad de México, mientras que personal especializado contra incendios de los sectores Tlaxcala, Venta de Carpio, Valle de México, Mendoza, Salamanca y Catalina, acudieron al lugar.
Las autoridades informaron que habitantes de la zona fueron desalojados y el área fue acordonada.
A través de su cuenta de twitter, el presidente Andrés Manuel López Obrador detalló que junto con el director de Pemex y el secretario de Defensa dio instrucciones para que se controle el fuego y se atienda a las víctimas.
A su vez, el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad,confirmó a CNN que murieron al menos 20 personas “calcinadas” y que hay 61 heridos.
Por su parte, Alfonso Durazo, Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de México, explicó que ante la emergencia ocurrida por la explosión del ducto en Tlahuelilpan, Hidalgo, se instaló el Comité Nacional de Emergencias.