La Caravana del Sur Resiste busca ser una voz unificada de resistencia en contra de los megaproyectos que amenazan a las comunidades de Chiapas y Oaxaca.
Desde el Consejo Autónomo Regional de la Costa de Chiapas hasta el Comité de resistencia civil de “Las Brisas” en Tonalá, las voces de las comunidades afectadas hicieron escuchar para denunciar los impactos negativos en sus vidas y sus territorios.
Por Karen Castillo / @karencitatacha
Este 25 de abril de 2023 dio inicio la Caravana del Sur Resiste, donde colectivos, comunidades en resistencia y organizaciones de derechos humanos recorrerán las rutas del Corredor Transístmico y del Proyecto Tren Maya para escuchar la palabra de comunidades y pueblos que resisten estos proyectos llamados “proyectos de muerte”.
La Caravana El Sur Resiste partió del Ejido La Gloria, donde el Consejo Autónomo Regional de la Costa de Chiapas realiza diversas actividades relacionadas con el aprendizaje y la compartición de saberes sobre agroecología y eco-técnicas. De ahí, se trasladaron al Ejido de El Progreso, donde se realizó una marcha y un mitin político.
Allí se escuchó la palabra del Consejo Autónomo, que compartió su experiencia de casi 30 años en lucha. Su lucha se ha concentrado en denunciar y resistir las altas tarifas eléctricas de la Comisión Federal de Electricidad y en exigir que se aplique el reconocimiento constitucional de la energía eléctrica como un derecho humano, y que este derecho sea garantizado por el Estado mexicano.
Miembros del Consejo Autónomo también enfatizaron que su organización se intersecta con otras problemáticas, como la imposición de proyectos que promueven un supuesto desarrollo, pero que en cambio solo traen afectaciones ambientales y económicas para sus habitantes. La violencia contra las mujeres y la falta de respeto a los derechos de las comunidades fueron también problemáticas mencionadas en el mitin.
Una mujer relató cómo el Gobierno ha llegado prometiendo carreteras, hospitales y escuelas a cambio de permitir que se lleven a cabo proyectos mineros. Pero las comunidades han resistido y se han organizado para evitar que las minas lleguen a esta región. Dentro de las funciones del Consejo Autónomo se encuentra la concientización en las comunidades para alertar “sobre las promesas vacías del gobierno” a cambio de aceptar proyectos de toda índole (inmobiliarios, mineros, energéticos y agrícolas).
Tonalá, Chiapas
Después de visitar la comunidad de El Progreso, la Caravana El Sur Resiste avanzó hacia la ciudad de Tonalá, Chiapas, donde se llevó a cabo otro mitin político organizado por el Comité de resistencia civil de “Las Brisas” en el jardín principal frente al Ayuntamiento de la ciudad.
Allí se habló sobre los megaproyectos llamados “Corredor Transístmico” y el proyecto denominado “Tren Maya”. La voz de los integrantes de varias comunidades del Istmo de Oaxaca, de Veracruz, de la comunidad Otomí residente de la Ciudad de México y del Pueblo de Santiago Mexquititlán fue de rechazo a estos dos proyectos por imponer una política de explotación y violaciones a los derechos de los Pueblos Originarios.
Durante el mitin se mencionó cómo estos dos proyectos son en sí un proyecto de exterminio del Sureste mexicano, ya que arrastran innumerables proyectos que beneficiarán a industrias extranjeras y no a las comunidades