La tarde del viernes 21 de julio del presente año, colectivos de comerciantes, artistas, trabajadoras sexuales y personas en condición de calle iniciaron una manifestación en la explanada de la Alcaldía Cuauhtémoc en la Ciudad de México, esto con la finalidad de exigir un alto al Operativo Diamante y el plan de “limpieza social” de la alcaldesa Sandra Cuevas.
Texto y fotografías Miranda Chavarria / @mirandachavarria
En la manifestación contra la alcaldesa Sandra Cuevas y el plan de “limpieza social” participó el Bloque antifascista No Binarie quienes también protestaron contra las propuestas transfobicas de la diputada del Partido Acción Nacional (PAN), América Rangel.
Los manifestantes se expresaron con consignas como “Sandra Cuevas fascista”, “la calle es de quien la trabaja”, “Sandra clasista, la Cuauhtémoc es racista” así como con bailes y una presentación de Stand Up a cargo de Cynthia Híjar.
Entre sus exigencias a Cuevas, están que se les deje trabajar en la calle, ya que aseguran, las personas que trabajan en las diferentes calles de la alcaldía, tienen familias que dependen de esos ingresos y no afectan a nadie.
Durante la manifestación, autoridades de la alcaldía intentaron impedir que protestaran, provocando a un par de personas, de igual manera algunos medios de comunicación presentes fueron agredidos por las autoridades.
Así mismo, las autoridades gubernamentales, solicitaron a los agentes de limpieza, para eliminar las pintas que los manifestantes hicieron, así como también se quitaron sus carteles que habían colocado anteriormente, sin embargo, se oponían a tales acciones y se colocaban al frente de las pintas para que estas no fueran eliminadas.
Finalmente, guardaron un minuto de silencio por los activistas asesinados: “un minuto de silencio por los hermanos, hermanas, hermanes, caídos en la lucha de un mundo mejor”, también exigieron a la Comisión de Derechos Humanos (CNDH), tome acciones en contra de los operativos que la alcaldesa hace y afecta a cientos de personas, ya que, aseguran, es una violación a sus derechos humanos y que cualquier cosa que les sucediera a alguno de los manifestantes, hacían responsable a Sandra Cuevas y su gabinete.