RECORDAR: Del latín re-cordis, volver a pasar por el corazón.
Eduardo Galeano.
En años recientes se han publicado varios libros sobre la desaparición forzada, pero muy pocos han abordado el recuerdo y la alegría por la vida de los familiares desaparecidos. El concepto búsqueda de vida es el eje transversal de este libro: Memoria de un corazón ausente.
Para las familias que buscan a los suyos el tiempo no pasa, es un presente continuo. La vida se congela en ese eterno ir y venir de un lado a otro sin resultados. En las oficinas burocráticas federales y estatales simulan que trabajan, y los oficios se mandan en copias por triplicado, dejando como resultado un abultado expediente que no dice nada y entonces, al paso de los días, meses y años, esos legajos de papeles se convierten en el símbolo de la impunidad del Estado, y muestran también el peso de la impotencia porque la búsqueda no avanza. Los familiares al no encontrar respuestas a las exigencias de presentar con vida a los suyos, empiezan a enfermar. El dolor de la ausencia se hace presente. La desesperanza con los años da como resultado enfermedades crónicas que las van consumiendo poco a poco. Pero la rabia y la dignidad las saca a flote y se organizan, se acompañan haciendo más llevadera la pesadilla a la que las han obligado a vivir todos estos años.
Jorge Verástegui González sabe de esto, pues el 24 de enero de 2009, fueron desaparecidos su hermano Antonio y su sobrino Antonio de Jesús Verástegui Escobedo, en Parras, Coahuila, y a casi 10 años de incansable búsqueda, no se sabe nada de sus familiares. También conoce las entrañas del sistema judicial, pues es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Nuevo León, y es especialista en Derecho de las Personas Desaparecidas y sus Familiares por la Universidad Autónoma de Coahuila. En los últimos años acompañó y dio asesoría legal a grupos de familiares desde el Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios A.C. y es cofundador de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC).
Como optimista-pesimista que es, ha estado frente a funcionarios de todos los niveles de gobierno y ha presenciado el desdén y el desprecio de muchos de ellos frente a las familias que desesperadamente exigen resultados. Sabe que las leyes, si no van acompañadas de voluntad nos sirven de nada.
Este libro publicado por la Fundación Heinrich Böll y coordinado por Jorge Verástegui González, nos abre una puerta para acercarnos al corazón de doce mujeres que no se quedaron paralizadas por el miedo frente a un terrorismo de un Estado, que decidió llamar a sus hijos, hijas, esposos, familiares “desaparecidos, extraviados, ausentes, daños colaterales” despojándolos de nombres, historias y vida.
Memoria de un corazón ausente trata de poner énfasis en la importancia de las relaciones humanas y los vínculos que se generan. De dar luz para comprender el porqué de la búsqueda de vida aun cuando se busque en fosas o SEMEFOS, dice Jorge Verástegui González: “no se trata exclusivamente de la localización espacial de la persona desaparecida o de sus restos, sino del cese de una situación anormal para quienes permanecen a su espera.”
Los recuerdos e historias aquí narrados son una lucha contra el olvido y una llamada de atención (una vez más), a la sociedad mexicana para que se organice y camine junto a los familiares en la búsqueda de las y los desaparecidos, aplicar la justicia a los responsables, y detener y desterrar de una vez por todas y para siempre la desaparición forzada en México.
El libro: Memoria de un corazón ausente
Historias de vida.
Se presentará en la Feria Internacional del Libro.
Sábado 1 de diciembre 16:00 hrs. Salón D. Área Internacional. Expo Guadalajara.
Participan:
Jorge Verástegui González
Coordinador del libro.
Natividad Guerrero
Guadalupe Morfín
Darwin Franco.