En un país donde la violencia de género es una realidad persistente, la historia de Yeritza Bautista Cortés se erige como un testimonio desgarrador de lucha y resistencia.
Por Eduardo García / @EduardoGrcp / @Somoselmedio
Ciudad de México, 20 de junio 2024.- A dos años de haber sido condenado a 11 años y 8 meses de prisión por tentativa grave de feminicidio contra Yeritza Bautista Cortés, Carlos Enrique “N” ha conseguido que el Poder Judicial anule la sentencia. Esta decisión se debe a la aprobación de un nuevo amparo a favor del acusado, lo que implica que el proceso judicial deberá comenzar de nuevo, volviendo a abrir una dolorosa herida para la víctima y su familia.
A través de un video publicado en YouTube, Yeritza narró su camino por el sistema judicial mexicano, describiéndolo como un proceso cansado y doloroso debido al sufrimiento y la constante re-victimización por parte de las autoridades y las redes sociales. Yeritza ha enfrentado no solo la violencia de su agresor, sino también una campaña de odio y desinformación en su contra, agravando su dolor y complicando su búsqueda de justicia.
“En medios de comunicación y en redes sociales se hablaba mucho de quién era, quién fui, por qué decidí hacerlo. Empecé a saber de mí en redes sociales, aunque yo nunca he tenido una. Empecé a recibir adjetivos como chimuela, coja, estéril, mentirosa, loca. Mi vida empezó a ser contada por terceras personas, personas que yo jamás incluso había visto” declaró.
Yeritza mencionó que en 2020, su expareja Carlos Enrique “N” intentó matarla en dos ocasiones. El primer ataque le dejó marcas físicas graves, como la perdida de cinco dientes, varías cirugías reconstructivas en la mandíbula y una larga rehabilitación para recuperar su movilidad. El segundo ataque fue un intento de estrangulamiento, lo que llevó a Yeritza a denunciar a su agresor, sin tener en cuenta la tortura psicológica y emocional que recibiría por parte de familiares y conocidos de Carlos.
Fue hasta septiembre de 2022 cuando Carlos Enrique “N” fue sentenciado a 11 años y 8 meses de prisión por tentativa grave de feminicidio. Sin embargo, el Poder Judicial permitió que su expareja interpusiera varios amparos, por lo que esta ocasión, ha sido la tercera vez que el juicio se reinicia.
A pesar de los desafíos, Yeritza ha continuado con su lucha. Ella ha cumplido con todas las demandas del sistema judicial, presentando pruebas, asistiendo a audiencias y sometiéndose a numerosos peritajes. Aun así, siente que sus derechos, como los de muchas otras víctimas, son ignorados y la justicia sigue siendo una promesa vacía.
Yeritza lamentó que el Poder Judicial, parece estar diseñado para cansar y desalentar a las personas sobrevivientes de feminicidio, ya que en lugar de protegerlas solo las re-victimiza.
“Entiendo claramente que su trabajo es cansarnos, es enfermarnos para morir en el camino, es obligarnos a desistir, es llenarnos de hartazgo y desolación. Estoy cansada de que los discursos, todos los discursos que escuchamos, se hacen a nosotras, hacia las víctimas. ¡Aguanta, ya falta poco, no te dejes, vale la pena! Cuando todos los discursos deberían ser dirigidos a los agresores, al sistema, a las familias encubridoras, a ser la parte que nos puso hoy en este punto de nuestras vidas” expresó.
Finalmente, Yeritza hizo un llamado a la sociedad, a los medios de comunicación y a otras sobrevivientes para visibilizar y combatir la impunidad. Por otra parte, pidió apoyo para compartir su historia y exigir un cambio en la forma en la que se actúa y se manejan los casos de violencia de género en México.
La historia de Yeritza Bautista Cortés es un recordatorio de las fallas en el Sistema Judicial, los cuales perpetúan la violencia contra las mujeres en México. Asimismo, nos da pie para conocer que la valentía y determinación son una luz de esperanza para muchas mujeres.
Además, es necesario y urgente reformar el Poder Judicial y el cambió de visión de la sociedad, ya que no solo se trata de escuchar a las víctimas, sino de actuar y apoyar para garantizar que las voces de las sobrevivientes sean escuchadas y respetadas.
Conoce la historia de Yeritza Bautista Cortés: Sobrevivir a un feminicidio: la historia de Yeritza Bautista